Al enfriarse, el aceite de oliva pasa de estado líquido a sólido. Así se mantiene mientras no se caliente. Se puede guardar en cubeteras en el refrigerador agregando algunas hierbas aromáticas, (orégano, romero), y sacar un"cubito" por vez.
Es muy rico untado en tostadas y por supuesto mucho más sano ya que no solo no aumenta el colesterol ni los triglicéridos, sino que los baja.